Un túnel que había sido construido para el tráfico de personas, drogas y mercancías ilícitas ha sido descubierto bajo el lecho del río Bravo (río Grande en Estados Unidos) y este tiene conección con Ciudad Juárez, Chihuahua (México) con El Paso, Texas (EE.UU.), informaron ayer viernes las autoridades mexicanas y estadounidenses.
El descubrimiento del pasadizo clandestino ocurre debajo de la frontera natural entre ambos países, a la altura de la puerta 28, y según las primeras versiones el túnel tiene conección con alcantarillas y drenaje de El Paso, lugar donde aparecían migrantes y traficantes para internarse en los suburbios de la ciudad.
El descubrimiento, hecho durante un operativo conjunto entre autoridades de los dos países, puso en evidencia, una vez más, las sofisticadas estrategias de los grupos delictivos para ejecutar delitos como el tráfico de personas y drogas.
El túnel, de unos 40 metros de longitud, se encontraba escondido debajo el lecho del afluente fronterizo y contaba con un sistema de ventilación rudimentario.
Según informes preliminares, la estructura fue localizada gracias a información proporcionada por un denunciante anónimo, lo que permitió a las autoridades desplegar equipos de búsqueda especializados.
El vocero de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos, Claudio Herrera, comentó que este túnel era empleado para organizaciones criminales para el tráfico de drogas.
“Hemos descubierto un túnel hecho por manos humanas (artesanalmente) que viene de Ciudad Juárez hasta esta área donde nos encontramos”, subrayó Herrera y explicó que en el operativo participaron agentes del FBI, Border Patrol, Agencia Estatal de Investigación de Chihuahua.
Además de agentes de la Fiscalía de Distrito Zona Norte del estado de Chihuahua, Ejército mexicano y Guardia Nacional.
El pasaje supuestamente era utilizado para el cruce de migrantes y contrabando de drogas, aunque, tras el hallazgo, la investigación se mantendrá en curso.
En el lugar se descubrieron herramientas de construcción, como palas, picos y hachas, además linternas, sopletes y radios de comunicación que fueron extraídos del túnel por las autoridades mexicanas y estadounidenses.