CIUDAD DE MÉXICO – Con resistencias y protestas de los mismos pobladores civiles, el convoy del Ejército Mexicano, la Guardia Nacional y la policía estatal se pudo abrir paso con gas lacrimógeno en un bloqueo que se encontraron con palos y piedras en el municipio de La Grandeza.
“Vayan a Comalapa”, “Liberen Comalapa”, se escuchaban entre los gritos de hombres y mujeres que les pidieron a las fuerzas armadas y los uniformados estatales, en referencia a que desmantelen a la “organización social” MAÍZ, a la que afirman son un brazo armado del Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG).
En este territorio que se encuentra bajo el control del Cártel de Sinaloa, los habitantes tuvieron que ser dispersados con el uso de gases lacrimógenos por un cuerpo de policías y militares que después desplegaron un equipo antimotín.
Los pobladores exigieron que el Ejército y la Guardia Nacional han sido omisos contra los grupos armados que operan desde Frontera Comalapa y mantienen aterrorizada a la población civil.
“Acá no están a los que buscan, están en Comalapa”, dijo un hombre que gritó a los militares.
El convoy de unos mil 500 policías estatales, elementos del Ejército Mexicano y la Guardia Nacional, irrumpió, además de en La Grandeza, en los municipios de Bellavista y El Porvenir.
La exigencia de los pobladores fue el mismo: pidieron a los militares regresar e ir hasta Comalapa, pues es el bastión principal. Les dijeron que mantienen sometidos a los habitantes de ese municipio así como a otros de la región de la Frontera y la Sierra de Chiapas.