Tras la muerte de los dos altos jefes del grupo paramilitar Wagner de nombres Yevgueni Prigozhin y Dmitri Utkin, el segundo al mando, Ksenia Anatolyevna Sobchak, presentadora de televisión estatal rusa, periodista y actriz, envió un grave mensaje al líder checheno Ramzán Kadírov.
Lo amenazó prácticamente de ser el próximo en la lista de asesinados por el Kremlin en “accidentes sin resolver”, como es el caso de los líderes Wagner que mueren en un supuesto accidente aéreo.
“Rusia tenía dos ejércitos privados no controlados por el centro: el primero, Prigozhina, el segundo, Kadyrov. Sólo queda uno”, escribió la bloguera en su canal Telegram.
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Con estas simples líneas estaría dando una clara señal que el próximo en morir será el checheno, aunque no sólo puede morir y listo, puesto que Kadírov controla a los suicidas chechenos que sin dudas estarían dispuestos a realizar ataques terroristas en varias partes del territorio ruso.
De momento los Wagner no se han vengado de la muerte de Prigozhin a como han amenazado con anterioridad, sin embargo han abandonado los campamentos que estaban instalados en Bielorrusia esperando no se sabe aún que orden.
