El papa Francisco realizó un duro reproche contra todos aquellos gobiernos del mundo que siguen sin llevar acciones correspondientes en contra el coronavirus.
A través de una carta dirigida a Roberto Andrés Gallardo, presidente del Comité Panamericano de Juezas y Jueces por los Derechos Sociales, el Sumo Pontífice envió saludos a los gobiernos que sí están aplicando las restricciones, a pesar que estas tengan un costo económico.
Al respecto hizo sentir su preocupación por «el crecimiento, en progresión geométrica, de la pandemia».
«Algunos gobiernos han tomado medidas ejemplares con prioridades bien señaladas para defender a la población», afirmó.
«Es verdad que estas medidas ‘molestan’ a quienes se ven obligados a cumplirlas, pero siempre es para el bien común y, a la larga, la mayoría de la gente las acepta y se mueve con una actitud positiva», agregó.
Sin embargo el papa dijo que hacer todo lo contrario es como condenar a muerte a muchas personas.
«Los gobiernos que enfrentan así la crisis muestran la prioridad de sus decisiones: primero la gente. Y esto es importante porque todos sabemos que defender la gente supone un descalabro económico», insistió.
«Sería triste que se optara por lo contrario, lo cual llevaría a la muerte a muchísima gente, algo así como un genocidio virósico», expresó el máximo líder de la iglesia católica romana.